Son aquellas aguas resultantes de la actividad humana, que proceden de ciudades, industrias, etc. Suponen un peligro potencial para el medio ambiente por cualquier vertido o filtración que liberan sustancias tóxicas al entorno, generando desastres ecológicos. Es por esta razón que deben seguir una serie de tratamientos para eliminar los residuos, que dependen de las características de las aguas residuales y su destino final.
Tenemos dos tipos de aguas residuales: Domésticas (barrios y municipios) e Industriales (alimentos, bebidas, papel, celulosa, químicos, destilación y otros). Esto nos lleva al uso de reactores, tratamientos anaeróbicos y aeróbicos, decantación de sólidos, lavado de biogas.
Para tratamiento de desagües domésticos, hay procesos adaptados para poblaciones de 5000 a 200000 habitantes, tiene muchas ventajas como ocupación de áreas pequeñas, ausencia de olores y bajo costo operativo.
Antes de realizar el proceso de tratamiento de las aguas residuales debemos pasar por el pretratamiento que consiste en eliminar los sólidos más grandes, arena, aceite. Hay 3 tipos de tratamiento para las aguas residuales: Primario, secundario y terciario
Primario: Las aguas se recogen por una serie de tubos colectores que las llevan a las instalaciones de depuración, tras una serie de procesos físico-químicos de las aguas.
Secundario: Cuando se quiere depurar aún más el agua.
Terciario: Cuando las aguas se vierten a espacios protegidos
Con este tratamiento se pueden reutilizar procediendo a la eliminación de agentes patógenos, sobre todo las bacterias fecales y los nutrientes, de manera que no supongan peligro para la salud humana.
Entre las aplicaciones esta agua puede ser destinada al riego de jardines, en limpieza de espacios públicos y también se la puede dirigir a los cauces receptores que se encuentren en espacios protegidos con una alta calidad y pureza en sus aguas.
Entre otros procesos para conseguir la mayor depuración están el uso de fosas sépticas, lagunaje, filtros verdes o procesos químicos (intercambio iónico, oxidación, reducción, etc.).
Escrito por: Ing. Constantino Suárez.
